El Museo del Perfume abrió sus puertas en 1963 para mostrar la evolución de los frascos y recipientes para perfumes, a través de la historia y en diferentes lugares geográficos.
“La visita al Museu del Perfum constituye una lección de historia del arte y un placer para la vista” – Ramón Planas, fundador.
En sus vitrinas se exponen desde recipientes egípcios, griegos, etruscos, romanos, árabes y de otras antiguas culturas, pasando por los esencieros, perfumadores y frascos para perfumes de todas las épocas, hasta las más modernas creaciones de los perfumistas de hoy.
Durante casi 100 años, este nombre ha estado conectado con Barcelona y el sector del diseño de interiores.
Pero primero, un momento de calma. La luz del sol se derrama sobre las frescas y relucientes sábanas, invitándole a saborear el lujoso entorno.
Ubicado en la Gran Vía, está a pocos minutos de la Plaça de Catalunya y a poca distancia a pie del bullicio de Las Ramblas.
Maravíllese ante su grandiosa fachada, sus intrincadas vidrieras y la detallada arquitectura medieval. Es una lección de historia, una obra maestra arquitectónica y una inmersión cultural, todo en uno.
Nuestro conserje, un maestro en combinar arte y ciencia, le guiará a las joyas acústicas ocultas de Barcelona.
Cuando se aloja en el Almanac Barcelona, no solo está cerca de esta maravilla arquitectónica, sino que prácticamente forma parte de su historia.
